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Dirigido a productores de la provincia de Soto, asistentes técnicos y demás actores del sector agropecuario de Santander.

La jornada inició con la presentación del Plan Estratégico de Ciencia, Tecnología e Innovación del sector agropecuario colombiano para el departamento de Santander, a cargo del Coordinador de Innovación Regional, Miller Solarte. A través de este Plan se identificaron las principales necesidades de los agricultores en la región, entre las cuales sobresalen las áreas temáticas de manejo de cosecha, pos cosecha y transformación, material de siembra y mejoramiento genético, y manejo de sistemas.

Posteriormente, el investigador José Mauricio Montes del Centro de Investigación La Suiza (Santander), presentó las principales afectaciones que puede presentar este sistema productivo y resaltó la importancia del monitoreo permanente del cultivo a través del cual se pueden identificar focos de plagas y enfermedades, y así realizar el control más adecuado de las mismas. “La principal herramienta de manejo es la recolección de frutos…es clave recoger los frutos afectados”, expresó al referirse al manejo de la plaga de ‘picudos’, específicamente.

Por su parte, el investigador Jorge Bernal del Centro de Investigación La Selva, explicó que existen tres razas de aguacate en el mundo: antillana, guatemalteca y mexicana.

Acerca de la presencia de aguacate en el mundo, el investigador evidenció que Colombia ocupa el tercer lugar con un 7 % de la producción mundial y cerca de 32.000 hectáreas sembradas en el país. El primer lugar lo ocupa México, que produce el 35 % de aguacate a nivel mundial y cuenta con 144.000 hectáreas sembradas, seguido por Chile en segundo lugar, con el 8 % de la producción mundial y aproximadamente 36.000 hectáreas sembradas.

Manifestó el potencial que Colombia tiene con respecto a la producción de aguacate, teniendo en cuenta factores como: clima, suelo, ubicación geográfica, vocación empresarial y agrícola, agroindustria, compromiso de entidades y voluntad política.

En tema de suelos y requerimiento nutricional de este cultivo, el investigador Gersain Rengifo expuso algunas recomendaciones que permiten optimizar las propiedades del terreno, y las diferentes prácticas que pueden llevar a cabo los agricultores para lograr la correcta distribución de nutrientes en las plantas de aguacate.

Explicó que, para tomar una muestra adecuada de un kilo de suelo, por hectárea, se deben tomar 10 sub muestras, y en caso de que exista diferente topografía en el lote, este se debe dividir, ya que las propiedades del suelo cambian cada 50 c.m.

El investigador resaltó la importancia de contar con un análisis de suelos previo a la siembra, y destacó el convenio actual que existe entre Corpoica y Servientrega, para facilitar a los agricultores del país este proceso. El costo total del servicio está alrededor de los $80.000 y los interesados podrán acercarse a los puntos Servientrega más cercanos para conocer el trámite.

En Santander se calcula que se requieren aproximadamente 400 años para que se forme un centímetro de suelo nuevo, ya que los suelos de la región son originarios de rocas sedimentarias. Estos, evolucionan de acuerdo al manejo, la materia orgánica que se incorpore, y el tipo de maquinaria o de labranza se utilice.