​En septiembre, los profesionales del sistema productivo en ganadería doble propósito vinculados al proyecto MAPA del Centro de Investigación Turipaná de Corpoica (Córdoba), avanzaron con tres talleres de capacitación a los productores en la conocida “Zona Loba” del departamento de Bolívar, mediante intensas jornadas en las que el objetivo principal fue promover una serie “Alternativas de suplementación alimenticia para bovinos en épocas críticas”. Para ello se presentaron opciones para la elaboración de pacas de heno artesanal y bloques multinutricionales.

El proyecto “Modelos de Adaptación y Prevención Agroclimática” (MAPA) que simultáneamente trabajó en el departamento de Sucre, se desplazó a los municipios priorizados de San Martín de Loba, Barranco de Loba y Hatillo de Loba en Bolívar. Allí se presentaron los principales lineamientos que tienen como propósito empoderar a los servicios locales de extensión y asistencia técnica con información agroclimática y tecnologías de manejo para mejorar la capacidad de enfrentar el riesgo de eventos climáticos extremos que pudieran presentarse en la zona.

MAPA se desarrolla en 18 departamentos, distribuido en 32 subregiones a través de las tres cordilleras y las dos costas, desde La Guajira hasta las llanuras costeras del Pacífico y el Nudo de los Pastos, en un plan piloto que pretende extenderse en una segunda fase hasta los Llanos Orientales y la Amazonía cubriendo así todo el territorio nacional.

En esta ocasión, los cerca de 70 asistentes compartieron esta experiencia y aseguraron que colocarán en práctica todos los conocimientos adquiridos. De esta manera consiguieron “aprender haciendo” gracias a las prácticas en campo y a la experiencia de transmitida por los profesionales de Corpoica. Así pudieron esclarecer todas las dudas generadas en torno a un tema coyuntural y de gran importancia en esta zona de la región Caribe donde aún la sequía golpea con fuerza.

Emiro Suárez, investigador profesional de la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (Corpoica), resaltó: “el ganadero de la zona debe iniciar incorporando dentro de sus labores, acciones de conservación de recursos forrajeros para época seca o húmeda, con el fin de asegurar la alimentación regular continua del ganado, bien sea para sostener el crecimiento, el engorde o la producción de leche o para continuar la producción en periodos difíciles cuando los precios del mercado son más altos”.

Víctor Vásquez Cossio, asistente técnico de la UMATA del municipio de Barranco de Loba, resaltó la capacitación: “este proceso de fortalecimiento tanto de productores como asistentes técnicos es pertinente en estos momentos, donde al mejorar las capacidades locales se logra manejar los riesgos agroclimáticos y tener un abanico de opciones tecnológicas en los diferentes sistemas de producción”.

De esta manera, el proyecto MAPA se ha convertido en un soporte al sector agropecuario en cada uno de los municipios que se han vinculado, en especial a los pequeños agricultores quienes se encuentran en un estado de vulnerabilidad ante los impactos negativos del cambio climático y la variabilidad climática.

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Mauricio Lengua M.

Coordinador de Divulgación y Prensa

Corpoica

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