​Se comprometió a que los pequeños productores golpeados por el invierno no perderán sus tierras y se buscarán soluciones a sus deudas vencidas tanto con FINAGRO como con el Banco Agrario.

Más de 400 organizaciones campesinas, afrodescendientes, indígenas y pequeños productores de arroz, maíz, ganaderos y algodón, • Se comprometió a que los pequeños productores golpeados por el invierno no perderán sus tierras y se buscarán soluciones a sus deudas vencidas tanto con FINAGRO como con el Banco Agrario.

• Más de 400 organizaciones campesinas, afrodescendientes, indígenas  y pequeños productores de arroz, maíz, ganaderos y algodón, participaron.
• En la Construcción del Gran Pacto Agrario vamos a seguir trabajando para estructurar una nueva vida en el campo colombiano.
 
Montería, Córdoba. Diciembre 10 de 2013 (@Minagricultura). “No les voy a fallar, les doy mi palabra”, fue el compromiso adquirido hoy por el Ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, ante un auditorio atiborrado con más de 400 representantes de organizaciones campesinas, afrocolombianas e indígenas, venidas de todo Colombia, que se concentraron en el auditorio de la Sede de Corpoica Turipaná, en Córdoba.

Hubo representantes de arroceros, ganaderos, maiceros y algodoneros, principalmente.
 
“Me comprometo con ustedes y desde aquí con los campesinos de todo el país que están reclamando justamente, con preocupación, por soluciones presentes y futuras a las crisis del sector”, dijo Lizarralde.
 
En la cumbre campesina, sus voceros llegaron exigiendo “soluciones y no más dilaciones”. Plantearon sus angustias y pidieron auxilio para solucionar sus graves problemas, algunos de los cuales son la consecuencia del invierno que les arruinó las cosechas en los años 2010 y 2011.
 
Rosmy Rojas Luna,  representante de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC), en Córdoba,  le dijo: “Ministro ayúdenos a solucionar nuestros problemas. Nosotros no vamos a paros, pero ayúdenos porque se nos caen las cosechas”.
En respuesta el Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural les contestó que  no puede evadir esa responsabilidad y menos ante la forma tan justa, decente, sincera y cierta, como lo pide también la ANUC.   
 
Añadió que se compromete con los campesinos a que no van a perder sus tierras por cuenta de los dos inviernos que afectaron tanto al campo. “No las van a perder y en eso me comprometo con ustedes”.
 
Sobre reclamos de deudas con el Banco Agrario y los cobros que les están haciendo con presiones y llamadas a las seis de la mañana y a las nueve de la noche, les respondió que como presidente de la junta del Banco Agrario y de Finagro, se compromete a conseguir solución a este tema.
 
“Aquí está Álvaro Navas, Presidente del Banco Agrario. No los dejaremos solos, vamos a solucionar éstos entre todos”.
 
Acción y fortaleza, vinimos a construir país, fueron algunas de las frases del Ministro de Agricultura, quien enfatizó: "les doy mi palabra: si estamos actuando legalmente, no hay de qué preocuparse, lo superaremos".

El Ministro también destacó el Presupuesto tan importante aprobado por el Congreso de la República, cercano a los $6 billones.
 
También señaló que el Gobierno sabe que venimos de una situación muy compleja, de dos inviernos que acabaron con la economía agraria campesina y este año se ha vivido  una depresión de precios internacionales y también el contrabando ha hecho mucho daño a la economía campesina.
 
Añadió que una respuesta a esa situación fue la aprobación del Presupuesto, que va a tener un rubro focalizado en el Pacto Nacional Agrario.
 
En ese sentido, el Ministro dijo que se están recogiendo en todos los departamentos, veredas y comunidades, las principales necesidades, preocupaciones e inclusive carencias, porque la depresión en los ingresos de los agricultores tiene que ser subsanada.
 
“Vamos a seguir trabajando para estructurar una nueva vida en el campo  colombiano. Lo vamos a focalizar. Tenemos ya determinadas las zonas que requieren más atención y nos vamos a poner a trabajar con los campesinos, los empresarios, las asociaciones y con los gobiernos, y con los secretarios de agricultura de las alcaldías y las gobernaciones  para que en un proceso de descentralizando construyamos una nueva política agraria para el país, pero  no solamente una nueva política agraria sino una nueva solución  no solo con visión de país, sino con visión de región mucho más cercana a la realidad de lo que se está viviendo en las distinta regiones”.
 
En estos momentos, por ejemplo, en esta zona hay una situación compleja con los agricultores del algodón y del maíz. Tenemos que poner a trabajar, como lo estamos haciendo, construyendo proyectos para sacarlos de la situación dramática en la que están en estos momentos.
 
Agricultura dejó de ser la cenicienta de los ministerios, porque el país reconoció que nos tenemos que volcar hacia ella y no solamente hacia la economía, sino hacia la gente, porque definitivamente los que mueven la economía son las personas, la gente.