Agricultores y ganaderos con ingresos por $120 millones anuales deben facturar electrónicamente.
El 1 de noviembre empieza a regir, con obligatoriedad, este modelo para la actividad agrícola y ganadera; productores manifiestan que el campo no está listo para esta transición.
En los últimos días ha resonado la inconformidad por parte del sector agropecuario debido a la obligatoriedad de la implementación de la facturación electrónica en sus actividades, que empieza a regir el 1 de noviembre, como lo establece la resolución 042 de 2020 de la Dian.
En desacuerdo
Fáber Buitrago Patiño, cafetero del Quindío, señaló que el sector, igual que las demás actividades económicas del campo, sortea día a día situaciones complejas por la variabilidad climática, el mal estado de las vías terciarias, las dificultades de la comercialización, la pandemia, entre otros factores que llevan a hacer un llamado urgente para que el gobierno nacional, congresistas, gremios, movimientos sociales y cívicos rechacen este tipo de medidas.
"Esto es traumático para un productor agropecuario por la misma falta de conectividad y operatividad. Algunas socializaciones virtuales que han hecho funcionarios de la Dian, advierten que, de no implementar la facturación electrónica, los productores del agro que están obligados pueden incurrir en sanciones que van desde multas hasta el cierre de la finca, ya que para algunos funcionarios de la Dian una finca es un establecimiento comercial. Como si no fuera poco que ya muchos productores del sector agropecuario estamos obligados a declarar renta, con esas bases gravables mínimas que se han adoptado en el esquema tributario del país".
Dijo que adelantan un proceso que lleve a la derogación del decreto 358 de marzo de 2020 "aplicable al grupo de productores que enajenan o venden productos de las actividades agrícola y ganadera, por atentar gravemente contra el estímulo de los granjeros a producir en el sector agropecuario colombiano. Muchos ya piensan en abandonar la actividad de producción de alimentos, debido a tanta indolencia y desconocimiento de algunos tecnócratas, quienes desde un escritorio atentan contra la seguridad alimentaria del país".
Jorge Ómar Tejada Galvis, director del Comité de Ganaderos del Quindío, señaló que todavía muchos ganaderos tienen dificultades en la conectividad, lo que ha sido la gran barrera para que los productores del sector puedan estar a tono con la facturación electrónica.
"En los ciclos de vacunación venimos haciendo la elaboración de los registros de manera electrónica y nos damos cuenta de que existen muchos ganaderos que ni siquiera tienen cuenta de correo electrónico, entonces nuestra postura es a favor de que este tema tenga una dilación y una transición para que todas las personas que van a estar sujetas a la implementación de esta norma puedan hacer primero el A, B, C en la facturación electrónica".
La posición de la Dian
En entrevista con LA CRÓNICA, el gerente de factura electrónica de la Dian, Mario Márquez Olier, explicó que deben hacer la transición en el sector agropecuario quienes registren ventas por 3.500 UVT —cerca de $120 millones al año—.
"Con un cálculo que hicimos, eso equivale a más o menos 10 hectáreas. Entonces, aquel empresario del sector que esté vendiendo más de $120 millones al año está obligado a facturar, de resto no. En el caso específico del café, por ejemplo, si se analiza cuántos venden más de ese monto anual, se llega a la conclusión de que el 1 % lo hace. La mayoría de los cafeteros colombianos —caso que se puede extrapolar a arroz, banano, plátano, ganado, entre otros— son minifundistas y ellos no tienen que facturar, lo tienen que hacer quienes ya tienen una actividad empresarial, que ya tienen un sistema contable, que la Dian ya sabe quiénes son, que son formales".
Anotó que cuando sacaron la resolución 042 se estableció una relación que pone a las empresas y a los sectores a facturar electrónicamente en un orden establecido, dejando de último al sector agropecuario, "entendiendo que en ese 1 % había unos problemas de conectividad, de internet y hemos venido trabajando con ellos a través de sus diferentes gremios y asociaciones para explicarles".
Márquez Olier precisó que la medida no llegó de sorpresa, sino que es un tema que vienen socializando desde 2019 y que se reconfirmó con la resolución 042 expedida el 5 de mayo de 2020.
"Venimos trabajando desde hace mucho tiempo en cómo hacerlo, porque una de las preguntas que más nos hacen es ¿qué pasa en los sitios donde no hay internet? Pues esto se puede partir en 2: el internet que llega a las casas o el internet del celular y la cobertura de celular de Colombia es mucho mayor que la del internet, entonces sí se puede facturar a través del celular".
Expuso que la Dian tiene una solución gratuita para los empresarios. "Si definitivamente no tiene internet, ni celular, la normativa dice que puede facturar en papel y cuando vaya a un sitio donde haya internet, manda las facturas".
¿Quiénes deben facturar electrónicamente y qué se necesita para hacerlo?
Érika Alejandra Duque Ruiz, contadora pública especialista en gerencia y administración tributaria, explicó a LA CRÓNICA que están obligados a facturar electrónicamente todas las personas jurídicas y naturales que enajenen bienes y servicios con ingresos brutos superiores a 3.500 UVT —$34.270 valor UVT 2019 - $35.607 vale hoy cada UVT—.
Anotó que también deben facturar bajo este modelo las personas naturales como minoristas, artesanos, agricultores, ganaderos, con ingresos por 3.500 UVT, que cuenten con más de un establecimiento de comercio, explotación de intangibles, usuarios aduaneros, consignaciones e inversiones superiores a 3.500 UVT. Así como los contribuyentes que optaron por el régimen simple de tributación.
"Se debe revisar si se han superado los ingresos cerrando 2019 y si no lo hicieron ese año, pero en 2020 sí, entonces deben facturar electrónicamente".
La experta explicó que para facturar de esta manera los ciudadanos necesitan un software de facturación electrónica —puede ser propio, a través de un proveedor tecnológico o la facturación gratuita de la Dian— y un certificado digital de firma. "Para esto deben contar con internet porque al momento en que facturen llega al correo electrónico del cliente y a la Dian".
Duque Ruiz relató sobre los acompañamientos que ha realizado a empresarios en este proceso, que para hacer la transición a la facturación electrónica se debe tener un presupuesto "porque hay que adquirir un software y si ya lo tenía hay que ajustarlo o buscar un proveedor, además de comprar el certificado digital".
Anotó que otros casos que ha acompañado se han acogido a este modelo con el servicio gratuito de la Dian. "Lo que pasa es que queda aislado de todo el software contable, de inventarios y todo lo que se viene trabajando en la empresa. Las compañías que no son tan grandes han optado por la herramienta gratuita de la Dian y también por la emergencia sanitaria, para ahorrar gastos".
Fuente: Crónica del Quindio