De acuerdo con la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, las constantes y fuertes precipitaciones han aumentado la aparición de los caracoles y babosas, en especial de los caracoles africanos alrededor del todo el país. Son considerados plagas porque son capaces de comerse hasta la mitad de su propio peso en una sola noche y se alimentan de más de 200 especies de vegetales y pueden devastar un cultivo.

Según el Ideam, las precipitaciones seguirán han aumentado de acuerdo a los umbrales del fenómeno de la niña. Además, es posible que persista entre julio y septiembre con 52% de probabilidad en el 2022. Por lo que estos caracoles se reproducen más rápido habitualmente en los periodos lluviosos y pueden llegar a poner unos 100 huevos cada mes.

Por eso, algunas formas de frenar esta plaga es poner un recipiente con cerveza enterrado en su jardín para que estos insectos amantes de la cerveza se acerquen a tomar y usted puede recoger el recipiente en la mañana con estos animales adentro. Se recomienda utilizar los implementos necesarios como los son los guantes de latex y tapabocas, ya que estos animales pueden causar enfermedades como meningitis, bronquitis, trastornos intestinales y encefalitis.

Esto, según explica Laura Tanzariello, coordinadora nacional del ProHuerta, el programa que el Ministerio de Desarrollo Social de Argentina y el Inta conducen hace 26 años, pues «el aroma de la malta fermentada atrae a los caracoles y eso permite capturarlos».

Estas plagas también son un gran problema para la economía de los agricultores pues afectan los cultivos de hostas, lechugas, albahacas, repollos, tomates, fresas, soja y tallos de planta de café.​

Fuente: ElProductor.​​